Fecha
18 de Julio, 2025
Autor
PROQUINSA
Lectura
15 min
La respuesta es un rotundo sí. Las pinturas de silicato, elaboradas a partir de minerales altamente resistentes, ofrecen un desempeño excepcional en aplicaciones exteriores. Su adhesión al soporte mineral se produce mediante una reacción química insoluble que evita la formación de una película superficial. Además, presentan una transpirabilidad equivalente a la del sustrato sobre el cual se aplican, lo que las convierte en una opción sobresaliente para muros expuestos a condiciones ambientales exigentes.
¿Qué es una pintura de silicato?
La pintura al silicato es un recubrimiento mineral cuyo aglutinante principal es el silicato potásico. Su funcionamiento se basa en la silicificación o petrificación, una reacción química que produce una unión mineral insoluble entre la pintura y el soporte. Esta tecnología fue desarrollada y patentada en 1878 por el investigador alemán Adolf Wilhelm Keim, inicialmente como solución para murales artísticos en fachadas sometidas a climas fríos y húmedos donde la técnica del fresco no era duradera.
¿Cuándo se utilizan las pinturas de silicato?
Estas pinturas son ideales para soportes minerales, como revoques y hormigón. No se recomiendan para superficies plásticas, de madera o recubiertas previamente con pinturas plásticas o de aceite.
Su elevada permeabilidad al vapor permite que la humedad residual en muros y revoques se difunda libremente hacia el exterior, lo que favorece paredes secas y evita daños estructurales.
Forman una película de alta resistencia, de aspecto mineral, que no cuartea y que presenta excelente durabilidad y penetración. Su estructura microcristalina favorece el equilibrio termohigrométrico gracias a su elevada transpirabilidad.
Además, al estar compuestas casi en su totalidad por materias primas minerales, son altamente respetuosas con el medio ambiente y no contienen sustancias nocivas, lo que las hace especialmente valoradas en la bioconstrucción.
Características y propiedades del silicato
Gracias a su refuerzo con siloxanos, estas pinturas permiten el paso del vapor, pero repelen el agua, lo que asegura un manejo óptimo de la humedad. Presentan alta resistencia a la radiación solar, lo cual resulta determinante para aplicaciones exteriores.
La durabilidad de las pinturas minerales al silicato puede superar los cien años, como demuestran edificaciones históricas, entre ellas el ayuntamiento de Schwyz, Suiza, pintado en el siglo XIX.
Su capacidad para cubrir imperfecciones, rellenar grietas y revocar superficies las convierte en una excelente herramienta para la restauración de edificios antiguos y para acabados decorativos en interiores con resultados de alto impacto visual.
Tipos de pinturas al silicato
¿Cómo se aplica la pintura al silicato?
Las pinturas al silicato destacan por su origen mineral, su bajo impacto ambiental, su extraordinaria durabilidad y su contribución a la salud y al equilibrio higrotérmico de las edificaciones. Por estas razones, se han consolidado como una de las opciones más valoradas en restauración, arquitectura sostenible y bioconstrucción.
En este contexto, empresas del sector químico industrial, como PROQUINSA, comprometidas con la innovación y la sostenibilidad, desempeñan un rol clave en el desarrollo y la promoción de tecnologías, como las pinturas al silicato. Mediante soluciones de alta calidad, una gestión responsable de insumos y un enfoque en la eficiencia energética, PROQUINSA impulsa edificaciones más duraderas y respetuosas con el medio ambiente, reafirmando su compromiso con un futuro industrial sostenible.